30.7.07

¿yo?



¿habré sido infiel?
te tiré las zapatillas a la basura, le dije al vecino que me pegabas.
¿habré sido infiel?
te fumé dos de los tres cigarrillos que te quedaban.
¿habré sido infiel?
te llené la cueva donde solías refugiarte de gente mía.
¿habré sido infiel?
le regalé mis pechos y la cintura y la espalda a un jardinero, para que me mintiera y dijera que allí crecería algo otra vez.

24.7.07

...


y tuve que lavarme los dientes con mi cepillo;
y tuve que morder el tapón de la bañera,
que ya estaba mordido, cómo puede ser;
y dejé que mi perro husmeara en tus cosas,
durmiera la siesta en el sillón, total no es mío;
y te grité que estabas jugando conmigo:
que para qué quiero la llave si no estás,
que cómo hago si no estás,
si la guitarra está desafinadísima
y sabés que no se tocar la guitarra!
si ni siquiera estás para escuchar mis gritos,
para decirte que me estoy cagando de frío,
que odio que apagues la calefacción
y me dejes sola acá, y te vayas al carajo,
como si no te importara.

22.7.07

yo quiero...

les propongo un arrojo de belleza,
una desnudes desvergonzada:

que se animen a elegir un poema, que los represente en lo que son.
un regalo para mí, yo haré lo propio: no hay un tiempo límite para postear.

tiene que ser una elección sin presiones, a veces puedo saber esperar.

(je je, los puse en un brete?)

doblegada espectacular e indómitamente
sucedida sobre tres mil quinientas boletas de luz
y gas y todo lo que empiece con servicios:
asomando la nariz esquiva y rozagante grisácea,
pisa con las puntas de los pies, sólo las puntas,
los vértices o las aristas de todo lo que llama mundo
ningún lugar más allá de sus libros y mis hojas.

14.7.07

sopa tetic


te juro que si no hubiera sopa,
si no fuera sábado tan sola,
si no tuviera coraje, te juro, te juro:
te diría cuán miserablemente estoy vestida,
cuánto me pasa la ausencia y me olvida,
me respira sorna la vida en la jeta,
se me acaban las ganas

se me olvidan las letras.

11.7.07

9 de julio


que la nieve te llene las orejas de fuego:
que te enseñe que estás vivo,
que el calor de mi cuerpo te alegre

decirte que fue lo mejor salir a la noche
cagarme de frío, sentir que estoy viva
que ni un taxi paró a ver mi sonrisa

llegar con la nariz hecha un cubito,
ver a los chinos sacándose fotos en 19,
amigables decirte "es como en china, igualito".

sacar al perro a la vereda, abrigado hasta el culo:
a la primer y última nevada de su vida;
pensar en que lindo sería que no fuera otro lunes de mentiras.

1.7.07

odas a la infancia II


te cuento que no hay como los cielos patagónicos
y pones esa cara de, estas exagerando de nuevo...
te digo que no, que esas nubes son increíbles,
que una vez que experimentas esa libertad...

el ábol enorme que hay a la vuelta de mi casa
y la planta parásita que lo tapiza, manta verde, farzada
la gran urbe y sus exponentes naturales, aplastantes...
como estraño el cielo patagónico te digo, aunque no me creas